Una escalera con curvas o incluso varios niveles no representa un problema para un salvaescaleras moderno. Descubra en qué se diferencia un salvaescaleras para tramos curvos de uno para escaleras rectas, los costes que conlleva su instalación y cuáles son los requisitos de viabilidad.
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La diferencia más notable entre un salvaescaleras para tramos rectos y uno para tramos curvos (por ejemplo, una escalera de caracol) se encuentra en los rieles. Estos deben adaptarse con precisión a cada curva y, por lo tanto, también a varios niveles, lo que implica un trabajo de fabricación a medida que eleva los costes. Los módulos de desplazamiento y el motor apenas difieren. Algunos modelos pueden, por ejemplo, girar automáticamente en la curva, facilitando el paso por zonas estrechas.
Que el salvaescaleras (o sus rieles) deban ser curvos depende, sobre todo, de la forma de la escalera. Un ejemplo muy común son las escaleras de caracol. Sin embargo, existen más situaciones en las que los rieles deben fabricarse a medida: por ejemplo, cuando se quiere instalar el salvaescaleras en dos, tres o más plantas. Incluso en escaleras rectas y con una sola planta, puede ser útil disponer de una pequeña curva. De este modo, se crea al inicio o final de la escalera un lugar donde el salvaescaleras pueda aparcarse cuando no se usa, ahorrando espacio y, si se desea, fuera de la vista.
Un salvaescaleras con asiento para una escalera de caracol u otro tipo de escalera con curvas se puede conseguir desde unos 8.000 euros, incluido el montaje profesional que apenas afecta la estructura del edificio. Las plataformas elevadoras (para usuarios en silla de ruedas) resultan sensiblemente más caras para tramos curvos, a partir de unos 15.500 euros nuevas con instalación incluida.
En líneas generales, con un salvaescaleras usado se puede ahorrar hasta un 50 % en comparación con uno nuevo. Sin embargo, en el caso de los salvaescaleras curvos, el potencial de ahorro es menor. La razón es que los rieles deben fabricarse o adaptarse de forma específica, y casi nunca sirven los rieles usados de otro proyecto. Por este mismo motivo, el alquiler de un salvaescaleras curvo tampoco suele compensar, pues el proceso de instalación y desinstalación de los rieles conlleva un coste extra que hace necesaria una cuota inicial muy superior.
| Compra de segunda mano | Compra nuevo |
|---|---|
| Módulo de tracción: 2.250 € | Módulo de tracción: 7.500 € |
| Rieles nuevos: 3.400 € | Rieles: incluidos |
| Instalación: 600 € | Instalación: incluida |
| Coste total: 6.250 € | Coste total: 7.500 € |
Si decide adquirir un salvaescaleras curvo de segunda mano, hágalo siempre a través de un distribuidor oficial, que le ofrezca un paquete completo con rieles y montaje. Así se asegura de que los modelos estén perfectamente revisados y cumplan con todas las normas de seguridad. Además, los distribuidores especializados están obligados a respetar la garantía legal. De manera opcional, también puede contratar extensiones de garantía y contratos de mantenimiento. En muchos casos, se ofrece la posibilidad de probar el salvaescaleras antes de comprarlo.
Los costes, a veces elevados, de los salvaescaleras curvos no tienen por qué cubrirse íntegramente con fondos propios. Conozca las subvenciones, ayudas y demás opciones de financiación tanto para particulares como para empresas.
En primer lugar, se debe evaluar la posibilidad de instalación. Para ello, concierte una cita con un proveedor especializado de su localidad.
Si el estudio de viabilidad es favorable, conviene analizar todas las ayudas y subvenciones disponibles. Un distribuidor de confianza puede orientarle en este proceso.
Una vez confirmados la viabilidad y el presupuesto, el proveedor procederá a fabricar los rieles. Acto seguido, se coordinará la fecha de instalación.
El día en que se monta el salvaescaleras, solo tendrá que esperar unas pocas horas. Por lo general, la instalación de un salvaescaleras curvo dura entre 4 y 10 horas, dependiendo del número de plantas.
Estas cuestiones se resuelven mejor con el asesoramiento profesional y un estudio de medición sin coste. ¡Contáctenos y déjese asesorar sin ningún compromiso!
